Los diputados de la UDI Gustavo Hasbún y Celso Morales presentarán en marzo una proyecto de reforma constitucional que busca entregarle al Congreso Nacional, las mismas facultades que tiene el Presidente de la República para decretar estado de excepción Constitucional.
De acuerdo al Diario U. de Chile, reconocidos expertos juristas consideran este tercer intento de Hasbún como un “Populismo Legislativo”, inviable y “que no tiene ningún sentido”.
Según el medio, el texto del proyecto explica las dos causas centrales para aplicar el estado de excepción por parte del Congreso: los desastres naturales y los conflictos en La Araucanía. Siendo este ultimo aspecto el que llama la atención de los expertos, Renato Garin, abogado y académico de la Facultad de Derecho de la Universidad Alberto Hurtado y de la Escuela de Gobierno de la Universidad de Chile, y Jaime Bassa, profesor de Derecho Constitucional de la Universidad de Valparaíso.
“La pregunta que surge es con relación a los graves atentados al orden públicos ejecutados por violentistas en contra de civiles indefensos como es el caso de la violencia en la Araucanía, se hace necesaria una mano firme que de una vez por todas logre traer a esta importante zona de nuestro país, la tan anhelada tranquilidad social, emergiendo con ello la legalidad y el Estado de Derecho. La respuesta constituye un sencillo sí, pero sin embargo la referida actitud no parece estar acompañada de una resuelta determinación de la autoridad gubernamental y en tal sentido la respuesta a estos extraordinarios actos de violencia no llega con la necesaria fuerza de la institucionalidad democrática nacional”, señala el documento de Hasbún.
Para Garin, “en principio, este proyecto de ley no tiene sentido”. “Es algo muy complejo particularmente por lo de La Araucanía porque sacas una decisión del Ejecutivo al Congreso. Un conflicto territorial, digamos, que puede desembocar en un instrumento político del Congreso contra el Ejecutivo”. Si bien el abogado aseguró que, en principio, no resulta una mala idea equilibrar las facultades del Ejecutivo en relación al estado de excepción, declaró que el problema de esta propuesta no es lo anterior, sino utilizar este recurso políticamente: “Lo que quiere Hasbún, en el fondo, es usar las circunstancias de los incendios, de Temucuicui contra el Ejecutivo, eso es lo que quiere”.
Por su parte, Bassa considera la propuesta “bastante mala. Parece ser una señal bastante prototípica de lo que se conoce como populismo legislativo. Esto es una reacción de un parlamentario, de un grupo de parlamentarios, que a través de sus atribuciones constitucionales busca principalmente quedar bien con la ciudadanía, o asestar un golpe político al Gobierno antes que impulsar un proyecto de ley que efectivamente prospere”. Asimismo, el profesor de Derecho Constitucional considera que con este proyecto se está recurriendo a las catástrofes naturales como excusa para volver a poner sobre el tapete la idea de que hay terrorismo en La Araucanía.
Añade también que en el supuesto de que un proyecto de ley con estas características sorteara la primera barrera, que el proyecto sea aprobado y logre el quórum necesario para ser incluido en la Constitución, al momento de ser puesto en práctica se encontraría con la necesidad de acuerdo mayoritario en el Congreso para operar: “Lo que hace absolutamente inviable e inoficiosa la competencia porque si el Congreso necesita de esos votos para dar una orden al Ejecutivo, esos parlamentarios solo van a votar a favor si el propio Ejecutivo les pide que voten a favor y eso no va a pasar. Es un proyecto que no tiene ningún sentido”, admite Bassa.
Fuente: Diario U. de Chile